No olvidar...

La post modernidad se ha vuelto un área sensible con el pasar de los años ¿estamos viviéndola o no? ¿Somos parte de aquel proceso? Aunque no tengamos clara la respuesta, las redes sociales que se han construido, hoy por hoy, a través de Internet son clave para situarnos en otro espacio de conversación.

Juan Carlos Camus, en su libro “Tienes 5 segundos”, nos entrega una serie de características tanto de la web como de sus usuarios, mediante las cuales nos concientiza de la importancia que tenemos al tener acceso a este mecanismo de comunicación.

Informar, crear, opinar, clasificar e incluso persuadir a quienes están buscando algún tipo de información o simplemente tienen la “suerte” de acceder a Internet, es un privilegio, del que pocos gozamos. El que esperemos, poco a poco, se vaya democratizando y pueda generar un acceso general e igualitario a los contenidos que hoy en día, nosotros podemos acceder (ojo, también interferir).

Lamentablemente, la tecnología nos deja fuertes repercusiones en nuestro diario vivir, una de ellas que se acentúa cada día más, es la comodidad. Los artefactos eléctricos nos facilitan la vida, ¿Internet?, también. Dejamos de lado documentos históricos, las bibliotecas, la investigación empírica, y nos enfocamos casi exclusivamente en los contenidos digitales.

Aunque Internet es y seguirá siendo una herramienta de información muy útil, es necesario dosificar su uso, tener en cuenta de que nos todos son conscientes del rol social que juega y no dejarnos seducir por su fácil acceso.